El subjefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Yemen, el general de división Ali al-Mushki, ha mantenido este domingo una reunión con la jefa adjunta de la misión de las Naciones Unidas para Yemen, Daniela Kroslak, en la que han discutido la reciente situación en este país.

En el encuentro, el alto mando castrense yemení ha dicho que “el mundo guarda silencio ante los bombardeos y los crímenes genocidas contra el pueblo yemení, pero cuando los yemeníes envían un dron para disuadir a los agresores, la voz de condena se escucha por todos lados”, ha lamentado.

Además, ha pedido a la representante de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que asuma su responsabilidad de llevar al mundo la voz del pueblo oprimido de Yemen. “Queremos que anuncie la opresión de esta nación a todo el mundo y le informe de los crímenes de los agresores y sus mercenarios”, ha aseverado.

Asimismo, Al-Mushki ha asegurado que el pueblo y la Resistencia seguirán luchando contra la coalición agresora, liderada por Arabia Saudí, que cuenta con el apoyo de EE.UU. y los Emiratos Árabes Unidos, entre otros países, hasta que se logre, a cualquier costo, la libertad y la independencia del país.

“El objetivo de EE.UU. no es establecer la paz en Yemen, sino saquear los recursos naturales del país incluso a costa de derramar la sangre del pueblo yemení”, ha denunciado el militar yemení.

Por su parte, Kroslak ha alabado la responsabilidad del país árabe frente a todas las resoluciones emitidas por la ONU y, además de reconocerse como testigo de todo lo ocurrido en este país durante su misión, ha afirmado que trabajará para transmitir el sufrimiento, las preocupaciones y aspiraciones de los yemeníes.

La agresión contra Yemen comenzó en marzo de 2015, con el inicio de una campaña de bombardeos y bloqueo de Arabia Saudí y sus aliados, bajo el pretexto de restaurar en el poder al fugitivo expresidente yemení Abdu Rabu Mansur Hadi.

Pese a las advertencias de las autoridades yemeníes y varios organismos pro derechos humanos sobre la crítica situación humanitaria, el régimen de los Al Saud no ha cesado su brutal agresión que la continua con el apoyo del Occidente.

En esta coyuntura, los menores han sido la parte más vulnerable. El Ministerio yemení de Salud anunció el pasado 20 de diciembre que el país pierde cada año 100 000 recién nacidos debido a la agresión y el bloqueo de Arabia Saudí y sus socios.

Fuente: Hispantv