El 50,7 % de los participantes de un sondeo llevado a cabo por la cadena HispanTV cree que el objetivo que buscan el expresidente hondureño Juan Orlando Hernández (2014-2022) y su formación política, Partido Nacional, al intentar tomar el Congreso, es “orquestar otro golpe de Estado”.

Por otro lado, el 35,8 % opina que, con esta medida, Hernández y su partido tratan de impedir la aprobación de las reformas del Gobierno de la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, quien asumió el jueves el cargo.

Mientras tanto, un tercer grupo que representa al 13,5 % de los lectores considera que la razón de las acciones del exmandatario hondureño y el Partido Nacional tiene como propósito otorgar “impunidad para políticos corruptos” del país centroamericano.

La crisis en el Congreso de Honduras se inició cuando un grupo de legisladores del partido de la nueva presidenta, Libertad y Refundación, desestimó la propuesta de Castro para nombrar como jefe del Legislativo a Luis Redondo, miembro de la agrupación aliada Salvador de Honduras, cuyo apoyo fue clave para ganar las presidenciales.

Entretanto, una veintena de disidentes respaldó al legislador Jorge Cálix. El domingo, en reuniones paralelas, tanto Cálix como Redondo fueron elegidos como presidentes del Congreso.

Ante la juramentación de Cálix, varios seguidores de Castro salieron a protestar en las carreteras del municipio de Zambrano en contra de la juramentación del candidato del partido Libre como presidente del órgano legislativo en sesión paralela.

La presidenta, a su vez, acusó a los disidentes de aliarse con el Partido Nacional para impedirle cumplir las transformaciones que prometió durante su campaña electoral.

Fuente: RL