La Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios alertó hoy sobre un aumento en los niveles de trastornos mentales en la población palestina de Gaza, especialmente entre los niños.
De acuerdo con el reporte de la entidad, muchos de los infantes residentes en esa franja están necesitados de servicios de salud mental y apoyo psicosocial.
La información reveló asimismo que durante tres días violentos a principios de agosto, durante los cuales las fuerzas de defensa de Israel lanzaron unos 147 ataques aéreos contra objetivos en la franja de Gaza, con saldo de 17 menores palestinos muertos.
“Para muchos niños, este fue su quinto conflicto en los últimos 15 años. Muchos ya viven con los efectos psicológicos a largo plazo de la exposición constante a la violencia”, señaló Adele Khodr, directora regional del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia para Oriente Medio y el Norte de África.
Por su parte, Yousef Shahin, director del Programa de Control y Prevención de Enfermedades de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo, declaró que en las personas afectadas los síntomas más comunes son depresión y epilepsia, además de otras dolencias físicas crónicas de origen psicológico.
En esa misma línea, el doctor Sami Owaida, del Programa de Salud Mental de Gaza, atribuyó los desafíos psicológicos que enfrentan los residentes de esta zona a la ocupación y bloqueo israelí de la Franja, que dura ya más de 15 años.
Allí, dijo, más del 65 por ciento de la población vive por debajo del umbral de la pobreza y más del 60 está desempleado.
El conflicto de mayo de 2021, por el cual quedó destruida gran parte de la ciudad y cientos murieron o resultaron heridos, provocó un shock psicológico, además de que sus habitantes lidiaron con altas tasas de pobreza y desempleo, lo que a su vez condujo al deterioro de la situación psicológica y de salud, apuntó el experto.
Según el reporte, más de dos millones de personas viven en la franja de Gaza, donde solo hay un hospital de salud mental con una capacidad de 50 camas, para atender a las cinco gobernaciones de la Franja.
Fuentes: Prensa Latina y www.elpais.cr