La denuncia del jueves se produce tras el brutal asesinato de un niño palestino a manos de las fuerzas del régimen israelí.

Rayyan Yaser Suleiman , de siete años, murió el jueves en la ciudad de Taquu, cerca de la ciudad de Belén, en la parte sur de Cisjordania ocupada por Israel.

Rayyan perdió la vida cuando él y sus compañeros de escuela eran perseguidos brutalmente por las tropas israelíes en su camino a casa desde la escuela.

Según el Ministerio de Salud de la Autoridad Palestina con sede en Cisjordania, el menor murió tras caer desde un lugar alto durante la persecución.

Reflexionando sobre el incidente, Hamas afirmó que los "crímenes contra los niños, el pueblo, la tierra y las santidades palestinas del ejército israelí no garantizarán la seguridad de Israel", informó la agencia de noticias del Centro de Información Palestino.

Tales atrocidades mortales, agregó el movimiento, preferirían "solo aumentar la fuerza de la resistencia palestina para defender las tierras y los derechos palestinos hasta la liberación total de Palestina".

Citando al personal médico del Hospital Gubernamental Beit Jala, donde Rayyan fue declarado muerto, la agencia oficial de noticias palestina Wafa dijo que el corazón del niño también había dejado de latir mientras huía de las tropas.

El padre del niño palestino, Yaser, confirmó que las tropas israelíes habían perseguido a su hijo hasta su casa y agregó que el corazón de Rayyan dejó de latir porque aparentemente estaba muy asustado, agregó Wafa.

El padre dijo que puso a su hijo en su automóvil y se apresuró al hospital, pero las fuerzas israelíes lo detuvieron a mitad de camino y revisaron a su hijo. Lo dejaron conducir después de asegurarse de que estaba muerto, dijo Yaser.

Fuente: PressTv