En su reciente informe quincenal sobre violaciones israelíes, OCHA explicó que las medidas de demolición se llevaron a cabo durante el período del 6 al 19 de diciembre de 2022 con el pretexto de que los propietarios no tenían permisos de construcción emitidos por Israel, “que son casi imposibles de obtener”.
13 de las estructuras fueron proporcionadas por donantes como asistencia humanitaria, según el informe.
Como resultado, las demoliciones desplazaron a 44 personas, incluidos 22 niños, y afectaron los medios de subsistencia de unas 2.000 personas.
“46 de las estructuras estaban en el Área C, incluidas dos estructuras demolidas en base a la orden militar 1797, que brinda solo un aviso de 96 horas y motivos muy limitados para impugnar legalmente una demolición”.
“El 6 de diciembre, las fuerzas israelíes confiscaron dos tiendas de campaña financiadas por donantes y una letrina en Isfey al Fauqa en Hebrón (al-Khalil), en un área designada por las autoridades israelíes como 'Zona de tiro 918'. Estas estructuras se proporcionaron en respuesta a la demolición de la escuela de la comunidad por parte de las autoridades israelíes el 23 de noviembre de 2022, alegando que carecía de un permiso de construcción. La escuela atendió a 21 estudiantes de tres comunidades en el sur de Hebrón”.
“Las siete estructuras restantes fueron demolidas en el este de Jerusalén, incluida una que fue destruida por su propietario en al-Issawiya, para evitar el pago de multas a las autoridades israelíes”.
“Durante el período del informe, durante tres días consecutivos (del 13 al 15 de diciembre), las fuerzas israelíes realizaron entrenamiento militar en Masafer Yatta, en el sur de Hebrón. Esta área ha sido designada por las autoridades israelíes como "zona de tiro" y declarada cerrada. El entrenamiento, que involucró vehículos blindados pero no munición real, restringió el acceso de los palestinos a los servicios básicos. Esta es la tercera vez desde principios de año que tales actividades tienen lugar en esta zona, donde más de 1.000 palestinos, incluidos 560 niños, viven en 13 comunidades de pastores en Masafer Yatta. Tales prácticas son parte de un entorno coercitivo que empuja a los palestinos a abandonar sus comunidades y puede resultar en un traslado forzoso”.
Durante el período del informe, OCHA también dijo que las fuerzas israelíes dispararon y mataron a seis palestinos e hirieron a 171 palestinos, incluidos al menos 44 niños, durante diferentes incidentes en Cisjordania.
En cuanto a las violaciones de los colonos, el informe dice que los colonos judíos hirieron a seis palestinos, incluido un niño, en seis incidentes y causaron daños a la propiedad palestina en 20 casos.
En otros ocho incidentes, cerca de Turmus 'Ayya (Ramallah), Jit (Qalqilya), Urif, Madama y Beit Dajan (todos en Naplusa), Yasuf (Salfit), Tuqu (Belén) y Mantiqat Shi' al Butum (al-Khalil ), los colonos arrancaron y dañaron unos 900 olivos en franjas de tierra palestina cerca de los asentamientos judíos, donde en algunas áreas el acceso palestino requiere la aprobación del ejército israelí.
Además, la propiedad palestina resultó dañada y el ganado resultó herido en siete incidentes relacionados con los colonos cerca de Qalqilya, Naplusa, al-Khalil y Belén. La propiedad dañada incluyó 12 vehículos, estructuras agrícolas, dos tanques de agua y cercas de piedra, según OCHA.
Fuente: Palinfo