Al-sharh (La Abertura)(en árabe: سورة الشرح) o Inshirah (إِنشراح) es la sura número 94 del Corán. Es una sura mecana ubicada en la parte treinta del sagrado Corán. La Sura al-Inshirah menciona las bendiciones de Dios para Su mensajero y el consuelo que Dios le ha dado. Uno de los versículos más famosos de esta sura es el versículo cinco, que promete que con cada dificultad viene la facilidad.
Contenido de la Sura
En la Sura al-Sharh, Dios dio consuelo al Profeta (PBD) recordándole sus bendiciones, incluida la apertura del corazón del Profeta (PBD), aliviando su carga y exaltando su nombre, y dice que las dificultades son acompañadas con la tranquilidad. Se dice que la Sura al-Inshirah es la siguiente de la Sura al-Ḍuha.
Puntos Importantes
Bendiciones de Dios sobre el Profeta (P) después de tolerar las dificultades de la Misión Profética.
El aumento de la indulgencia espiritual del Profeta (P).
Después de toda dificultad, hay tranquilidad.
El alivio de la carga de la misión profética.
En el camino de predicar la religión de Dios, las dificultades deben ser bienvenidas.
Versículos famosos
فَإِنَّ مَعَ الْعُسْرِ يُسْراً (۵)
Así, en verdad, con la dificultad, la facilidad.
En verdad, junto a la dificultad, la facilidad. - Corán 94: 5-6
En la exégesis de este versículo, se menciona que el contenido de este versículo no se trata únicamente del Profeta (PBD) y su tiempo; sino que es una regla general que da buenas noticias de tranquilidad y alivio a las personas fieles que resisten las dificultades. Un punto importante en este versículo es que el Corán dice que en el mismo tiempo que hay dificultades, hay facilidad y tranquilidad para las personas, y no ha limitado la llegada de la tranquilidad al tiempo después de las dificultades.
La primera bendición mencionada en este sura es Sharh Sadr (expansión del pecho, apertura del corazón), que se refiere a estar preparado para aceptar la revelación, cumplir con las responsabilidades de la profecía y permanecer paciente y firme frente a las dificultades y adversidades. El segundo es aliviar las dificultades y aligerar la carga de profetizar y guiar a la gente. Y el tercero es dar a conocer al Santo Profeta y exaltar su reputación. Por ejemplo, en Tashahhud, que es parte de Salah, Dios colocó el nombre del Profeta (la paz sea con él) junto a Su nombre.