"Toda Gaza puede describirse como un gueto de limpieza étnica de palestinos de su tierra", dijo Brar, también cirujano cardiovascular, en una entrevista a Press TV el lunes.

Brar dijo que fue acusado de mostrar “odio racial” contra Israel al distribuir el libro “Sionismo: una herramienta racista, antisemita y reaccionaria del imperialismo”, escrito hace unos años.

Fue arrestado en Londres durante una manifestación de solidaridad con el pueblo palestino, tras la guerra de Israel en la Franja de Gaza que se lanzó el 7 de octubre después de la Operación Tormenta de Al-Aqsa de Hamás.

"No puede ser racismo repetir hechos históricos", afirmó.

"Han atacado deliberadamente a cualquiera que intente equiparar los crímenes del Israel sionista con los nazis alemanes", añadió.

Brar apoyó a los grupos de resistencia palestinos diciendo que ésta es la única manera en que los palestinos pueden reclamar sus derechos.

“[Occidente] se comporta como si la historia comenzara el 7 de octubre, y antes del ataque 'injustificado' de Hamás contra Israel todo era pacífico y todo se reduce a los combatientes de Hamás, pero cuando lo pones en contexto, queda muy claro que Israel, Estados Unidos y el Reino Unido son los agresores”, afirmó.

Llamó al sionismo “una entidad racista implantada por los británicos como una fuerza colonial de colonos”.

Brar también arremetió contra los líderes occidentales por justificar los crímenes de Israel contra los palestinos con el fin de utilizar a Israel como herramienta para dominar la región rica en petróleo.

Dijo que Israel es una “títere” de Estados Unidos y el Reino Unido y señaló otras intervenciones y acciones de los dos países, como la “hostilidad hacia Irán, la ocupación de Irak, la ocupación de Afganistán, la guerra en Yemen, la ocupación de Siria, guerra para desplazar al gobierno de Moammar Gaddafi en Libia, y otras guerras implacables” como planes para interferir y robar sus recursos.

Hamás lanzó por sorpresa la Operación Tormenta de Al-Aqsa contra la entidad ocupante en respuesta a la campaña de derramamiento de sangre y devastación del régimen israelí contra los palestinos que lleva décadas.

Tel Aviv también bloqueó el suministro de agua, alimentos y electricidad a Gaza, sumiendo a la franja costera en una crisis humanitaria.

Más de 15.000 palestinos, la mayoría de ellos mujeres y niños, han muerto en los ataques israelíes.

Fuente:  PressTV