Actualmente, el mercado de la confección es un sector en crecimiento. La ropa que cubre completamente el cuerpo a menudo se asocia con creencias religiosas, pero aunque a menudo se menciona en el contexto islámico, no se limita a una región o religión en particular.
Si se espera que el mercado mundial de ropa islámica alcance los 311 mil millones de dólares para 2024, muchas mujeres británicas todavía tienen muy pocas opciones en lo que respecta a la ropa.
Entre 2017 y 2021, "The Conversation" entrevistó a 23 mujeres musulmanas del Reino Unido de diferentes etnias o culturas: bangladesíes, británicas, indias, nigerianas, turcas y tunecinas para ver cómo, como musulmanes que viven en un país predominantemente no musulmán , su identidad religiosa ha influido en su moda.
El Reino Unido es un escenario ideal para este tipo de estudio, ya que tiene un sector minorista sólido que fomenta las elecciones individuales y se considera un país diverso y multicultural.
Para estas mujeres, estar a la moda y tener una identidad musulmana son criterios importantes. Pero todavía tienen dificultades para elegir entre los dos.
Izma afirmó: “Verás, como soy musulmana, algunos diseños de ropa modernos no se adaptan a mi estilo de vida debido a mi deseo de respetar el hijab y las reglas islámicas”.
La escritora Sara Al-Zahir dijo: “La moda simple (islámica) está dirigida a personas que muestran menos o que prefieren una apariencia cómoda y ropa de talla grande. En el mundo islámico, la moda casta juega un papel esencial a la hora de mostrar la identidad religiosa. No es una moda pasajera y coyuntural, es una necesidad porque es algo que está anclado en nuestra mentalidad y en nuestras creencias, y que nos acompaña durante toda nuestra vida”.
En 2018, cuando Londres siguió a Nueva York en la introducción de opciones de moda para interiores, los expertos creyeron que esta afluencia impulsaría ese tipo de moda a la corriente principal e impulsaría el mercado, más allá de la moda de alta gama. Sin embargo, este mercado sólo ha atraído temporalmente la atención de diseñadores y minoristas.
Para 2030, la población musulmana representará más del 25% de la población mundial, esto significa que las marcas de moda tienen una gran oportunidad de resolver el dilema entre moda y modestia, y diseñar diseños para este mercado demográfico en pleno crecimiento.
En 2021, la periodista Yasmin Khatun Dewan elogió los modelos que la destacada modelo musulmana con hiyab, Halima Aden, presentó a la sociedad.
Como dijo Anna, otra mujer entrevistada en 2021: “El hecho de que seas musulmana no significa que no puedas usar lo que quieras. Siempre puedes llevar vestidos muy bonitos, si son largos, o túnicas largas que te gusten”.