Las autoridades dijeron el viernes que se allanaron 57 direcciones en Estambul y otras siete provincias, lo que resultó en la captura de los sospechosos, mientras todavía estaban buscando a 12 sospechosos más.

El ministro del Interior, Ali Yerlikaya, dijo que las autoridades tomaron medidas una vez que determinaron que el Mossad estaba planeando ejecutar "tareas tácticas como reconocimiento, persecución, asalto y secuestro contra ciudadanos extranjeros que residen en nuestro país".

Los vídeos de algunas de las redadas turcas publicados por Yerlikaya mostraban a la policía irrumpiendo en los apartamentos de las personas, esposando a los sospechosos y escoltándolos hacia los coches de policía.

La Fiscalía General de Estambul llevó a cabo una investigación que descubrió que nueve personas habían vendido información al Mossad a través de investigadores privados, dijo la Agencia Anadolu.

Fueron reclutados para espiar a los palestinos que residen en Turquía, así como a los activistas israelíes opuestos a su régimen, añadió la agencia de noticias.

Los funcionarios israelíes contactaron a los sospechosos a través de las redes sociales, dijo.

El informe llega semanas después de que el jefe de la agencia interna de espionaje de Israel, Shin Bet, dijera en una grabación de audio que su organización estaba preparada para destruir a Hamás “en todos los lugares”, incluidos el Líbano, Turquía y Qatar.

"Haremos esto en todas partes, en Gaza, en Cisjordania, en el Líbano, en Turquía, en Qatar. Tomará algunos años pero estaremos allí para hacerlo", dijo el jefe del Shin Bet, Ronen Bar.

El presidente Recep Tayyip Erdogan había advertido anteriormente a Israel diciendo que estaría "condenado a pagar un alto precio" si procedía con su intención de atacar a funcionarios de Hamás en territorio turco.

Ankara, al igual que Irán, pero a diferencia del Reino Unido, Estados Unidos y la Unión Europea, no identifica a Hamás como una organización terrorista. Los llama "libertadores que protegen su tierra".

Fuente: PressTV