Las fuentes de seguridad informaron que los cazas golpearon un campamento de entrenamiento de las fuerzas que luchan contra la alianza durante los últimos casi tres años.

Los bombardeos de la coalición saudita han dejado hasta el momento más de 12 mil muertos, de acuerdo con estimaciones de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Esta cifra es susceptible de aumentar en todo momento, debido a los ataques continuos y el férreo bloqueo de la coalición contra Yemen.

Las medidas de Riad desbordaron la situación humanitaria en Yemen, donde se registra la peor hambruna en décadas y un brote sin precedentes del cólera, entre otros males. 

La coalición, compuesta mayoritariamente de países del golfo Pérsico, se formó en marzo de 2015 para realizar una campaña aérea con el pretexto de apoyar al Gobierno del presidente yemení Abd Rabbuh Mansur Haddi contra los opositores hutíes.

Lo cierto es que desde 2014 Yemen es escenario de violentos combates entre la resistencia de los hutíes del movimiento Ansarullah y los partidarios del extinto expresidente Alí Abdalá Saleh, por una parte, y las fuerzas leales al presidente legítimo Abdo Rabu Mansur Hadi, por otra, a las que apoya la coalición.

Varias rondas de negociaciones de paz bajo los auspicios de la ONU no lograron poner fin al conflicto que causó más de 8.000 muertos y más de 44.500 heridos desde marzo de 2015, según la OMS.

La Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU estimó que casi 21 millones de personas, de un total de 27,4 millones de la población yemení, necesitan algún tipo de ayuda o protección humanitaria.

Además, el país árabe está viviendo una epidemia de cólera: al menos 1.740 personas murieron por esta enfermedad. Antes un representante de Unicef en Yemen había estimado que el número de casos de cólera en el país alcanzaría los 300.000 para finales de agosto.

Fuente: Al Mayadeen/ Sputnik