Un juzgado de Barcelona investiga a siete neonazis vinculados al partido de extrema derecha Democracia Nacional por «amedrentar» a musulmanes durante los primeros meses del año pasado ante la inminante apertura de una mequita el barrio de Nou Barris, de la capital catalana.

Los hechos sucedieron a partir de marzo de 2017. Estos radicales aprovecharon las protestas en contra de la apertura del centro de culto islámica «para manipular políticamente y exaltar a los vecinos» en contra de la mezquita, según el relato de los hechos del fiscal de Barcelona especializado en delitos de incitación al odio. El Juzgado de Instrucción número 21 de Barcelona ha admitido a trámite su denuncia y ha abierto diligencias.

Los radicales dejaron ante el local mensajes como «Esta es nuestra tierra y vamos a defenderla» y «España cristiana y no musulmana», lanzando pintura roja contra la fachada simulando que era sangre. También sellaron con silicona los candados para impedir la apertura y colocaron embutidos de cerdo en la puerta «como una forma más de ofender sus sentimientos religiosos», pues los musulmanes consideran que la carne de este animal es impura.

Durante otra de las protestas dieron patadas contra la persiana del local e hicieron pintadas con los lemas «España para los cristianos», «Todo por la Patria» y «Hoy como ayer, España no se rinde». Luego, pusieron una bandera con el escudo de su partido y se hicieron una fotografía para colgarla en sus perfiles de redes sociales.

El fiscal les acusa de un delito de coacciones, por haber impedido el ejercicio de un derecho fundamental, y de otro de incitación al odio, la violencia y la discriminación contra los musulmanes.

La mezquita de Nou Barris está abierta desde hace unas semanas una vez que consiguieron las licencias y permisos pertinentes, según informaron a ABC fuentes del Ayuntamiento.

Fuente: ABC