“No tenemos intención de ingresar a Bangladés. No somos bangladesíes... somos ciudadanos originales de Myanmar."
Dil Mohamad, un líder local rohingya, ha dicho este domingo a los periodistas que los aldeanos regresarán a Myanmar (Birmania) solo si se les garantiza la seguridad, una compensación por las casas quemadas por orden del Ejército birmano y un permiso para reasentarse en sus antiguas aldeas.
“No tenemos intención de ingresar a Bangladés. No somos bangladesíes... somos ciudadanos originales de Myanmar”, ha sostenido Mohamad durante un viaje dirigido por el Gobierno bangladesí a través de la región fronteriza de Maungdaw.
Al mismo tiempo, ha rechazado cualquier movimiento a los campos de tránsito por temor a un confinamiento a largo plazo. “No queremos ir a los campamentos de tránsito. Necesitamos ir directamente a nuestros hogares”, ha precisado.
El Ejército de Myanmar, respaldado por el Gobierno y los extremistas budistas del país, inició una ofensiva con consecuencias mortales contra los musulmanes rohingyas en el estado occidental de Rajine a finales de 2016. Los ataques se intensificaron en agosto del año pasado.
La campaña militar, descrita como una “limpieza étnica” por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y como “genocidio” por otras organizaciones humanitarias internacionales, ha desplazado a más de 760.000 rohingyas, que han huido al vecino país de Bangladés para poner a salvo sus vidas.
El 23 de noviembre de 2017, Bangladés llegó a un acuerdo con Myanmar para repatriar a los refugiados rohingyas presentes en su territorio, pero la implementación del pacto sigue siendo poco probable por la continua falta de responsabilidad.
Fuente: HispanTV