La organización recomienda a los gobiernos la llamada "infraestructura verde" y las "soluciones basadas en la naturaleza (SbN)" según consta en el informe de buenas prácticas.

Se trata, sobre todo, de proteger los manantiales y las cuencas hidrográficas, así como de ampliar la calidad y cantidad de la cobertura vegetal, además de la recomposición de suelos o la utilización de tejados con plantas y jardines verticales en las ciudades.

El informe apuesta por encontrar un equilibrio entre las llamadas "tecnologías grises" predominantes hasta ahora, como las presas, cisternas y tuberías, y los mecanismos verdes, aún muy subutilizados.

La Unesco cita como ejemplo de buenas soluciones un proyecto del Gobierno de Brasil llamado "Productor de Agua", que funciona en el Distrito Federal.

En apenas seis meses consiguió firmar 137 contratos con trabajadores rurales que plantan árboles nativos en los márgenes de los ríos y cuidan de la calidad del suelo, trabajo por el que son pagados durante cinco años.

Los datos del informe también estiman que serán necesarios, aproximadamente, diez trillones de dólares en infraestructura hídrica en el mundo entre el año 2013 y 2030.

De ese total el porcentaje que se dedica a tecnologías verdes todavía es bajo (apenas el 1% en las ciudades del mundo) y representa 25.000 millones de dólares invertidos por gobiernos, compañías de agua y alcantarillado, empresas y comunidades, según el portal Ecosystem Marketplace.

Dado que su implementación no siempre supone gastos extras (a veces basta con proteger adecuadamente el nacimiento de un río) la Unesco confía en que estas estrategias vayan ganando terreno progresivamente y recuerda que el año pasado más de 480 millones de hectáreas en todo el mundo se vieron afectadas positivamente por este tipo de gestión.

Hasta el viernes 23 de este mes Brasilia acogerá decenas de debates, exposiciones y conferencias en que autoridades, científicos, investigadores, juristas y empresas de 170 países reflexionarán sobre la gestión de los recursos hídricos del planeta.

El Foro Mundial del Agua se realiza cada tres años en un país diferente: la primera edición tuvo lugar en 1997 en Marrakech (Marruecos), y la última, en 2015 en Daegu (Corea del Sur).

En paralelo a la celebración del Foro Mundial del Agua se celebra el Foro Alternativo Mundial del Agua, impulsado por ONGs, movimientos sociales y sindicatos críticos con el evento oficial por su perspectiva mercadológica sobre la gestión del agua. 

Fuente: Sputnik