La decisión se produce después de las fuertes críticas sufridas por el jugador después de una sesión de fotos con el presidente turco Recep Tayyip Erdogan. Una parte de las críticas reprendían al jugador por expresar su apoyo a un personaje como Erdogan.

Otros se han centrado en los orígenes turcos de Ozil, argumentando que la foto en cuestión sería evidencia de la extrañeza del jugador a la nación alemana, contra la cual Ozil no sentiría ningún sentido de pertenencia.

Estas fueron las críticas más difíciles hechas al jugador. Críticas que han tomado la forma de ataques reales.

Esta situación llevó al jugador de origen turco a tomar una decisión drástica. Estas son las palabras escritas en su perfil de Twitter:

"Con el corazón dolido y después de los recientes acontecimientos, he decidido: no jugaré en Alemania internacionalmente, hasta que no sienta racismo y falta de respeto hacia mí".

IQNA