Un abogado del Club de Prisioneros Palestinos (PPC) que visitó a Jater en prisión relató que “los interrogadores la están amenazando con detener a familiares si no confiesa”. Sin embargo, Jater no habría cedido a las presiones, según el letrado.

La periodista permanece todo el tiempo esposada y con las piernas inmovilizadas, en una pequeña silla en la sala de interrogatorios, añadió el abogado. Sólo se le permite abandonar esa postura para ir al baño.

El PPC hizo hincapié en que la periodista, de 42 años de edad, ha sido sometida a interrogatorios “duros y continuos” desde el momento en el que fue detenida. Algunas de las sesiones se habrían prolongado durante 20 horas.

En sus columnas, Jater suele criticar a Israel, así como la cooperación de la Autoridad Palestina con la ocupación.

Su marido, Hazim Al-Fajuri, reveló que durante la última sesión en los juzgados unos días atrás, Jater le contó que había comenzado a sufrir fuertes dolores de espalda debido a las largas horas que permanecía inmovilizada en la silla.

También denunció que las autoridades israelíes la están presionando para lograr una confesión, con el fin de presentar cargos contra ella y poder condenarla.

Según Al-Fajuri, también la habrían amenazado con hacer daño a su hijo menor, de dos años de edad.

Fuente: Monitor de Oriente