Durante el foro de política virtual del Washington Institute titulado "Hezbollah-Shia Dynamics and Lebanon's Election: Challenges, Opportunities, and Policy Implications", Schenker reconoció que la ex administración estadounidense de Donald Trump explotó las protestas de 2019 en un intento por difamar y debilitar a Hezbollah junto con sus aliados

El funcionario estadounidense dijo que la anterior administración estadounidense impuso sanciones a las organizaciones financieras afiliadas a Hezbollah y al Jammal Trust Bank, y señaló que la medida se tomó inmediatamente después de que Moody's Investors Service rebajó la calificación de emisor del Líbano a C desde Ca.

Estados Unidos estaba detrás de la rebaja de la calificación de Líbano y la administración Trump deseaba sincronizar este movimiento con la sanción de Jammal Trust Bank, dijo Schenker en el foro.

En este contexto, el funcionario estadounidense dijo que Washington también sancionó al principal aliado de Hezbolá, Gebran Bassil, como parte de los esfuerzos destinados a asediar a Hezbolá y sus aliados.

Señaló que mientras estuvo en su puesto visitó el Líbano dos o tres veces, y agregó que durante estas visitas se reunió con empresarios y periodistas chiítas anti-Hezbolá.

Además, Schenker dijo que no era optimista sobre las elecciones de 2022 y que no creía que los resultados influyeran en la situación política actual del país, y señaló que la administración estadounidense no debería apostar por estas elecciones.

En una evaluación de los candidatos rivales de Hezbolá, Schenker los describió como “líderes individualistas, egocéntricos y narcisistas”.

Afirmó que en su mayoría buscan obtener títulos y los beneficios del liderazgo en lugar de crear un cambio real en la composición política del país.

Fuente: Al-Manar