Durante una entrevista exclusiva con la cadena HispanTV, Maduro ha insistido este viernes en que la Cumbre de las Américas no podría ser de toda América sin Venezuela, Cuba y Nicaragua.
El mandatario venezolano, quien está de visita en Teherán (capital iraní), ha dicho que la Cumbre “ha sido un evento de exclusión versos no exclusión”, y se pretendía que sea una cumbre, “pero realmente ha sido una reunión”.
Por otro lado, ha elogiado la reacción de los Estados latinoamericanos ante exclusiones los tres países, y ha destacado que ha habido un repudio general de los presidentes a esta pretendida exclusión “inamistosa, bochornosa” de Nicaragua, Cuba y Venezuela.
Entretanto, ha resaltado la defensa del presidente argentino, Alberto Fernández, a favor de la integración en este conclave, calificando sus declaraciones ante la Cumbre como un discurso “firme, claro y valiente”, que “puso todos en su lugar, a nombre de América Latina y el Caribe”.
“Después de rechazar la exclusión frente al propio presidente [de EE.UU., Joe] Biden, le dijo que nosotros tenemos nuestra comunidad latinoamericana y caribeña que se reunirá en plenaria en los próximos meses y nosotros le invitamos a usted para que participe en exclusión en nuestra reunión. Creo que realmente le puso la guinda a la torta”, ha considerado.
Es más, al ser preguntado sobre si el país excluido de la Cumbre fue Estados Unidos, Maduro ha respondido que “EE.UU. se autoexcluyó de la Cumbre de las Américas”.
La polémica que rodea la Cumbre de las Américas comenzó cuando EE.UU., como país anfitrión del evento, decidió el 2 de mayo no invitar a Cuba, Nicaragua y Venezuela, provocando la ira del presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, quien afirmó que no asistiría, a menos que se incluyeran a todos los países del hemisferio occidental en la cita panamericana, una decisión que fue apoyada por varios países del continente.
Maduro, a la cabeza de una delegación de alto rango, ha llegado este viernes por la tarde (hora local) al Aeropuerto Internacional de Mehrabad en Teherán, capital iraní, como parte de su gira internacional que realiza desde el martes y que comenzó con una visita a Turquía y después a Argelia.
Venezuela e Irán, dos países unidos por una visión común en cuanto a temas internacionales y víctimas de medidas coercitivas de Estados Unidos y sus aliados, tienen nexos diplomáticos desde hace más de 60 años, pero estos se convirtieron en estratégicos con la llegada del difunto comandante Hugo Chávez al poder en Venezuela en 1999, quien tendió un puente entre sus revoluciones, la Bolivariana (de Venezuela) y la Islámica (de Irán).
En el marco de la alianza estratégica Teherán-Caracas, Irán envió en mayo de 2020 a Venezuela cinco barcos cisterna cargados con 1,53 millones de barriles de gasolina y aditivos para abastecer a la nación suramericana, sumida en una fuerte escasez de combustible, como resultado de las medidas coercitivas ilegales de EE.UU.