“Creyentes, manténganse alejados de las conjeturas; actuar sobre alguna conjetura puede conducir al pecado.” (Sura Al-Huyarat, versículo 12)
Tener sospechas y prejuicios sobre los demás conduce a incidentes malvados.
La sospecha y el prejuicio provocan el espionaje y esto conduce a la aparición de imperfecciones. Aquellos que son conscientes de estas imperfecciones las señalarán mientras hablan con otros y esto es murmuración.
“No se espíen unos a otros ni murmuren. ¿Alguno de ustedes quisiera comer la repugnante carne muerta de su hermano? " lee el resto del verso antes mencionado.
El hecho de que el Corán haya comparado la murmuración con comer la carne muerta del hermano de uno se debe a que cuando murmuramos a alguien, esa persona no está presente para defenderse. El acto es como cortar un trozo de carne del cuerpo de alguien. Por lo tanto, murmurar es tan malo como comer la carne de un muerto.