Una edición con copistas en Europa y luego otra en Rusia, en tiempos de Catalina II.
Aunque parezca increíble, la primera vez que se imprimieron copias del Sagrado Corán, no fue en un país islámico. Ni sucedió en Meca ni en Medina. La primera vez que el Sagrado Corán pasó por una impresión fue en Venecia, Italia, en el año 1530. Pero aquella vez se emplearon copistas y luego se inscribió cada página en una tablero de madera. Años más tarde, la primera impresión en términos algo más modernos, se hizo en tiempos de Catalina II en Rusia: el año 1787.
En tiempos del Profeta Muhammad, el Corán había sido redactado solamente por el Imam Ali ibn Abi Taleb y estaba grabado en las mentes y corazones de los musulmanes. Recién cuando gobernaba Uthman bin Affan, la comunidad llegó a un acuerdo y se estableció el Corán tal como lo conocemos hoy en día.