Mubahala es una situación en la que dos individuos o grupos buscan la maldición divina contra el lado opuesto para demostrar su legitimidad.
El Evento de Mubahala comenzó cuando el Santo Profeta (bpd) envió una carta a los cristianos de Najran para invitarlos al Islam y terminó después de que retiraron su reclamo y algunos de ellos aceptaron el Islam.
Una delegación de los cristianos de Najran compuesta por más de diez de sus miembros principales viajó a Medina y después de que las dos partes insistieran en su legitimidad, se decidió que el problema se resolviera a través de Mubahala.
El verso de Mubahala (verso 61 de Surah Al-Imran) se refiere a este evento:
Si alguien disputa contigo a este propósito, después de haber sabido tú lo que has sabido, di: «¡Venid! Vamos a llamar a nuestros hijos varones y a vuestros hijos varones, a nuestras mujeres y a vuestra s mujeres, a nosotros mismos y a vosotros mismos. Execrémonos mutuamente e imprequemos la maldición de Alá sobre quienes mientan». (61)
En la mañana del Día de Mubahala, el Santo Profeta (bpd) junto con su hija Hazrat Zahra (p), su yerno Hazrat Ali (p) y sus nietos Imam Hassan (p) e Imam Husayn (p) salió de Medina.
Cuando Abu Haritha, uno de los miembros principales de la delegación cristiana, vio a los que acompañaban al Santo Profeta (bpd), dijo:
“Juro por Dios que se ha sentado como los profetas solían sentarse para Mubahala”, y regresó. . Agregó:
“Si Muhammad (la paz sea con él) no tuviera razón, no se atrevería a venir por Mubahala de esta manera, y si él (la paz sea con él) se involucra en Mubahala con nosotros, incluso un cristiano no permanecerá con vida antes de que termine este año”.
Según el académico universitario iraní Rasoul Raoulipour, una revisión de los versos del Corán, especialmente los versos que aparecen en Surah Al-Imran después del verso de Mubahala, muestra que el enfoque principal del Corán no es el de Mubahala sino la interacción entre los dos lados y guía por el camino de la verdad.
Él dice:
Después de Mubahala, cuando los cristianos de Najran se negaron a hacer Mubahala, se reveló este verso:
Di: «¡Gente de la Escritura !Convengamos en una fórmula aceptable a nosotros y a vosotros, según la cual no serviremos sino a Alá, no Le asociaremos nada y no tomaremos a nadie de entre nosotros como Señor fuera de Alá». Y, si vuelven la espalda, decid: «¡Sed testigos de nuestra sumisión!» (64 Ali-Imran)
El Santo Profeta (bpd) luego les dijo que ahora que no quieren hacer Mubahala, lleguemos a un acuerdo sobre nuestros puntos en común.
Mubahala no tuvo lugar y el Corán no dijo que hagamos Mubahala siempre que esté preparado para ello. Más bien, el Corán dice que ahora hablemos de puntos en común.
Creo que en el texto sagrado, tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento, hay terreno para el diálogo. Los seres humanos llevan sus quejas a los mensajeros de Dios y les hacen preguntas.
Otro punto es que en el Corán y en los textos sagrados vemos que el Santo Profeta (bpd) y otros mensajeros de Dios son insultados y acusados pero continúan el diálogo y la interacción.
Básicamente, los textos sagrados han venido a crear comunicación e interacción.
Su objetivo principal es la reconciliación. Han venido a decirles a los seres humanos que no conocen el camino que hay un camino correcto, hay un Dios y hay un protector, así que no deben preocuparse.