Una nueva encuesta de ABC News-Washington Post, publicada este domingo, muestra que la inflación y el descontento económico han puesto en peligro las posibilidades políticas del Partido Demócrata en las elecciones intermedias del martes en Estados Unidos.
De hecho, el 43 % de los estadounidenses indica que la situación financiera de su familia ha empeorado desde hace dos años, mientras el 39 % señala que su situación se ha mantenido igual en los últimos dos años, y el 18 % afirma que ha mejorado.
Para los participantes del estudio, la inflación, que alcanzó su máximo punto en los últimos 40 años, ha sido factor fundamental para impactar en la economía personal y familiar.
Los datos son incluso peores de lo que parecen porque el Gobierno excluye en su cálculo los precios de los alimentos y de la energía. El récord está siendo impulsado por aumentos en otras necesidades como alojamiento, atención médica y transporte público.
Esto se considera como un “desastre” para el gobernante Partido Demócrata de cara a las elecciones de medio mandato y marca malas noticias para Biden y los demócratas que están desesperados por retener el control del Congreso y deben tratar de convencer a los votantes profundamente preocupados por los altos precios de que pueden ayudar a reducir la inflación.
El propio Biden reconoció el viernes pasado que la inflación es el “principal desafío económico” de su gobierno y dijo que tiene un plan para bajar los precios y reducir los costos de atención médica y energía.
Esto, mientras que, con un aumento de los precios del 8,2 % y un aumento de los salarios de solo el 4,9 %, los economistas dicen que el estadounidense promedio vive al límite y hay muchas familias que no llegan a fin de mes.
Aunque casi todos los indicadores económicos son negativos, los banqueros de la nación parecen decididos a restringir los préstamos justo cuando las empresas están retirando nuevas ofertas de trabajo en números récord y la deuda de las tarjetas de crédito está en un nivel récord. La situación ya se ha deteriorado en el dilema teóricamente irresoluble del liberalismo: la estanflación, que es recesión más inflación.
Las políticas económicas de derecha también pueden producir un estancamiento político: la probable toma de posesión republicana de la Cámara de Representantes, y posiblemente del Senado, obstaculizaría la capacidad de Biden para aprobar cualquier legislación importante durante los próximos dos años.