El tribunal de la región de Bayonne, condenó a la dueña de un restaurante en Francia a pagar una multa simbólica de 600 euros por impedir el ingreso a su negocio de una mujer musulmana por llevar el hijab.
El tribunal dictaminó que la dueña de un restaurante de 64 años era culpable de discriminación basada en la religión por pedirle al cliente que se quitara el velo.
Las imágenes obtenidas durante el incidente muestran a la madre y al hijo llegando a la puerta del restaurante, y la dueña del negocio dijo que no dejará entrar a los dos clientes porque su madre lleva un "pañuelo en la cabeza de la Edad Media".
La dueña del restaurante afirmó que "el velo es una herramienta para someter a las mujeres" a su cliente musulmana, a quien luego se negó a dejar entrar.
La mujer musulmana, que manifestó estar impactada por las palabras dirigidas a ella, acudió a la comisaría y presentó una denuncia por ser discriminado.