Con la República Islámica de Irán haciendo mejor de lo esperado en la copa mundial de fútbol de este año, ha habido muchos comentarios despectivos entre los periodistas deportivos occidentales.

Un comentarista de la BBC durante el partido Gales-Irán el viernes describió a este último como “una nación en crisis”. Sin embargo, se olvidó de mencionar las causas de esa “turbulencia”.

Probablemente sea lo mejor que no hizo el esfuerzo, ya que dudo que el resultado hubiera sido más esclarecedor.

La cobertura de los medios occidentales de los acontecimientos en Irán desde septiembre ha sido engañosa en el mejor de los casos y desinformación de las agencias de inteligencia en el peor (la mayoría de las veces ha sido lo último). Desafortunadamente, esto es parte del curso cuando se trata de la cobertura de los medios británicos y estadounidenses de estados enemigos oficiales como Irán. La cobertura está tan distorsionada que es peor que inútil.

Casi completamente ausente de la narrativa engañosa de un valiente movimiento de protesta nacional que grita “mujer, vida, libertad”, hay un hecho simple: las mismas agencias de inteligencia occidentales que configuran gran parte de la narrativa de los medios también están liderando una guerra indirecta de baja intensidad contra Irán. .

El movimiento de protesta, tal como es, ha sido utilizado como tapadera por los grupos terroristas armados que actualmente atacan el país. En esencia, este es un intento de la CIA, el MI6 y el Mossad de Israel de repetir la misma estrategia de guerra indirecta que llevaron a cabo en Siria a partir de 2011.

Fuente: asawinstanley