El reciente asalto a los edificios del Congreso Nacional, la Presidencia y el Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil es un acto totalmente ajeno a la legalidad, la democracia y la civilización, afirmó Stefano Marchi, periodista italiano de larga trayectoria internacional y autor de la monografía digital multilingüe Las huellas de Oscar Niemeyer en Brasil.
En declaraciones exclusivas para Al Mayadeen Español, Marchi reveló los daños a las obras de arte causados por los manifestantes bolsonaristas al irrumpir de manera irracional en las sedes de los tres Poderes de Brasil.
Son numerosas las obras de arte perjudicadas, algunas de ellas con un valor inestimable, afirmó el periodista.
Los edificios asaltados los diseñó el famoso arquitecto brasileño, Oscar Niemeyer, y forman parte de un patrimonio mundial cultural declarado por la UNESCO, recordó.
Por fortuna las edificaciones solo sufrieron quiebres de vidrio o espejos, detalló Stefano.
Las afectaciones más graves están en famosas pinturas, esculturas y otras obras de arte situadas dentro de esos edificios institucionales.
Esas sedes gubernamentales albergaban una rica colección de arte y algunas piezas sufrieron daños irreparables y no podrán restaurarse, lamentó.
Entre las obras destrozadas y sin posibilidad de reparación está un reloj de péndulo del Siglo 17 elaborado por el artista francés Baltazar Martinou, quien trabajó para el Rey Luis XIV.
Décadas más tarde la corte francesa donó la pieza al rey de Portugal Joao VI y también emperador de Brasil, quien la llevó al país a inicios del siglo XIX, relató el periodista.
Este reloj está ubicado en la tercera planta del Palacio de Planalto, piso que también alberga el despacho del presidente de Brasil.