Los EE. UU. pueden estar enfrentando un cambio en la vida política, ya que más de la mitad de los ciudadanos estadounidenses no pueden diferenciar entre las noticias honestas y deshonestas de sus medios. Gallup y la Fundación Knight encuestaron a los estadounidenses en un intento de tener una mejor idea de cómo los ciudadanos ven la prensa y los resultados fueron pésimos.
En su informe anual, la Fundación informó que quienes tienen una opinión favorable de los medios informativos no superan el 26%, lo que genera interrogantes.
Mientras los periodistas en activo buscan comprender y abordar las preocupaciones de los ciudadanos, el informe también encontró que el 72 % de los ciudadanos estadounidenses cree que sus medios tienen la capacidad de servir al público; sin embargo, la mayoría no tiene buenas intenciones.
El estadounidense promedio desconfía profundamente del gobierno, con solo 1 de cada 5 ciudadanos estadounidenses, o el 20% de la población, confiando en que su gobierno hará lo correcto, según una nueva encuesta realizada por el Centro de Investigación Pew.
“Los estadounidenses siguen desconfiando e insatisfechos con su gobierno”, dijo Pew. "Solo el 20% dice que confía en que el gobierno de Washington hará lo correcto casi siempre o la mayor parte del tiempo".
Teniendo en cuenta las agendas, especialmente cuando se trata de políticos y partidos políticos que anuncian las noticias, es natural que una de las partes solo intente atacar a la otra, sin importar si la noticia es precisa o no. Como tal, solo el 23% de los ciudadanos cree que las salas de redacción nacionales se preocupan por los mejores intereses de su audiencia.
El 61% de los encuestados informaron que no poseen la capacidad de distinguir la información buena de la mala, lo cual es alarmante, pero no sorprendente. Cuando las personas ven la misma noticia presentada de manera diferente en diferentes medios de comunicación, la confianza se fractura; Los estadounidenses no saben qué creer.
En un intento por reconstruir la confianza, la jefa de MSNBC , Rashida Jones, expresó su preocupación sobre el asunto mientras abogaba por entregar la verdad a las audiencias de los medios y lo declaró el mejor camino a seguir. “En lugar de mirar una cultura política o una perspectiva política, nos enfocamos en la verdad”, dijo Jones.
Jones agregó que aunque la verdad no puede ser bonita, sigue siendo fundamental informarla tal como es desde todos los ángulos.
La verdad puede ser ofensiva a veces, pero ¿deberíamos enmascararla en un intento de servir a una agenda o partido político específico? Los partidos tienden a operar en un espectro de medios totalmente diferente, ya que atacan a sus oponentes mientras ignoran el periodismo basado en hechos y promueven la desinformación a un ritmo elevado.
Es como si los medios de comunicación no pudieran brindar una noticia informativa directa sin detenerse a pensar en cómo puede afectar u ofender al público oa un partido político, recurriendo eventualmente al plagio oa la tergiversación parcial o total de la noticia.