“Continúan los esfuerzos a nivel público y político para concluir el caso de la presencia de fuerzas estadounidenses en suelo iraquí. No habrá negligencia ni vacilación en expulsar a los estadounidenses”, dijo el martes el legislador de la Alianza Fatah, Karim Aliwi, a la agencia de noticias iraquí al-Maluma.

Los comentarios se produjeron después de que el jefe del Pentágono, Lloyd Austin, hiciera una visita no anunciada a la capital iraquí de Bagdad.

La visita se produjo pocos días antes del 20 aniversario de la invasión liderada por Estados Unidos al país árabe bajo el falso pretexto de que el régimen de Saddam Hussein poseía armas de destrucción masiva.

Estados Unidos retiró soldados de Irak entre 2007 y 2011, pero los volvió a desplegar en 2014 junto con otros socios para supuestamente contrarrestar la amenaza del grupo terrorista Daesh [en árabe, 'ISIS/ISIL'].

Irak logró acabar con el dominio territorial del grupo Takfiri en el país gracias a los sacrificios del ejército nacional y de las Unidades de Movilización Popular [PMU] antiterroristas, que contaban con el respaldo de Irán.

Sin embargo, Washington mantuvo sus fuerzas dentro de Irak desafiando una resolución que requería su retiro. La resolución fue aprobada por el parlamento del país árabe en enero de 2020 luego del asesinato por parte de Estados Unidos del legendario comandante antiterrorista de Irán, el teniente general Qassem Soleimani, y su compañero de trincheras iraquí Abu Mahdi al-Muhandis, el segundo al mando de las PMU.

El ejército de EE. UU. declaró el final de su misión de combate en Irak en diciembre de 2021, pero aún mantiene una cantidad de tropas allí con el pretexto de desempeñar un papel de asesoramiento y entrenamiento.

Aliwi dijo: “La resistencia iraquí, la movilización popular y los grupos políticos comparten una visión sobre la expulsión de todas las fuerzas estadounidenses del suelo iraquí, y si esto no se hace, otras formas de expulsar a los estadounidenses estarán en la agenda”.

También instó al parlamento iraquí a implementar la resolución de 2020 sobre la expulsión del personal militar estadounidense.

“La presencia continua de las fuerzas estadounidenses es una violación de las decisiones de la ONU. La expulsión de las tropas estadounidenses no es una decisión de una determinada facción política, sino una opción nacional”, dijo el legislador.

La visita de Austin a Bagdad se produjo unos días después de que el presidente del Estado Mayor Conjunto de los Estados Unidos, el general Mark Milley, hiciera una visita no anunciada a Siria, donde se reunió con las tropas de ocupación estadounidenses.

Fuente: Al Ahed