El discurso de la extrema derecha en Italia sobre el Islam lleva a que los nuevos conversos a la religión sean tratados como "inmigrantes" o "potenciales terroristas" por parte de la sociedad, según Raffaello Villani, fundador de la Unión Islámica Italiana, quien afirmó que este el discurso afecta negativamente a la sociedad.
Raffaello Villani, fundador de la Unión Islámica Italiana, que se convirtió al Islam en 2011, y Stefano Sugari, asesor legal de la Universidad Italiana de Parma, que se convirtió al Islam hace 4 años, hablaron con la Agencia Anadolu sobre los problemas que enfrentan los italianos que se convirtieron. al islam.
Villani afirmó que Italia "tiene entre 300 y 500 mil italianos musulmanes, la mayoría de los cuales necesitan conocer más el Islam y estudiar sus orígenes y creencias".
Villani agregó que “tras su conversión al Islam, enfrentó duras reacciones de su familia, que se ve afectada por el discurso de los medios y la propaganda negativa promovida por los partidos de extrema derecha”.
Villani señaló que debido a la "publicidad negativa" en los medios, "parte de los italianos ven a sus compatriotas musulmanes como 'malas personas'".
El fundador de la Unión Islámica Italiana señaló que los italianos que se han convertido recientemente al Islam "no saben cómo explicar el Islam a sus familias, y que las mujeres musulmanas italianas enfrentan diversos hostigamientos por parte de sus familias".
Villani agregó: "En Italia, las familias creen que sus hijas, que comenzaron a cubrirse la cabeza después de convertirse al Islam, se han sometido a sus maridos, y que el velo simboliza la esclavitud".
Villani afirmó que la extrema derecha "aterrorizó a las familias con los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos e impuso la idea de que los miembros musulmanes de familias italianas se convertirían en terroristas en el futuro".
Por su parte, Stefano Sugari, asesor legal de la Universidad Italiana de Parma, dijo que su interés por el Islam “comenzó durante sus años escolares, cuando le gustaba la historia y el Oriente”.
Explicó que "nació en una familia cristiana católica, y que sus padres no sabían nada sobre el Islam antes de su conversión, y que se convirtió al Islam en 2019 gracias a uno de sus amigos musulmanes italianos".
"Mi familia nunca creyó que un italiano pudiera convertirse en musulmán, porque habían escuchado en los medios que el Islam es una religión 'peligrosa y mala'", añadió Sugari.
Sugari reveló: "Hay un aumento en el número de italianos que se han convertido recientemente al Islam, y que los partidos de extrema derecha están tratando de cambiar esta situación a su favor sembrando el miedo en la sociedad".
Señaló que "el odio hacia el Islam ha sido alimentado por el aumento del flujo de inmigrantes a Italia en los últimos años, y dijo: no todos los italianos tienen la misma opinión, pero cuando un italiano se define como musulmán, es tratado como inmigrante".
Sugari subrayó que las familias católicas, así como las familias italianas no religiosas, "rechazan deliberadamente a sus hijos que se han convertido al Islam".
El abogado explicó que "tenía un amigo que fue despedido de su trabajo porque era musulmán, y que personalmente fue objeto de mucho acoso en el trabajo y en la vida social solo porque se convirtió al Islam".
Sugari señaló que la retórica de la extrema derecha sobre el islam y los musulmanes "afecta negativamente a la sociedad, y que los medios intentan retratar a los musulmanes como traidores y estúpidos que caerán en brazos del extremismo en cualquier momento", según la agencia Anadolu.