En la mayoría de países musulmanes, entre otros, Irán, Arabia Saudí, Catar, Palestina, los Emiratos Árabes Unidos (EAU), Kuwait, Baréin, Siria, El Líbano, Egipto y Yemen, el mes sagrado se inicia este jueves, 23 de marzo.
Para los musulmanes, ayunar a diario desde el alba hasta la puesta del sol durante el Ramadán, el noveno mes del calendario de la hégira lunar y musulmán, es una oportunidad para reflexionar y lo consideran un periodo de prueba de su nivel de fe y creencia en los mandamientos de Allah (Dios, en idioma árabe.).
Con todo, la filosofía del Ramadán es más que religiosa, pues desde el punto de vista sanitario, purifica el cuerpo; del aspecto mental, fortalece la voluntad; del tema moral, hace sentir empatía con los que sufren por la falta de alimento.
Históricamente, fue en este mes cuando se reveló el Corán, en su totalidad, al profeta del Islam, el Hazrat Mohamad (que la paz sea con él y sus descendientes), tal y como manifiesta este libro sagrado.
Al final del mes de Ramadán, en Eid al-Fitr, la fiesta que se considera el más importante del Islam, los fieles celebran su triunfo espiritual.
Cada año, el calendario lunar islámico suele ser más corto que el calendario solar entre 10 y 12 días, y por lo general, el Eid al-Fitr y el Ramadán rotan y se celebran en diferentes épocas del año. Sin embargo, los horarios y fechas precisos cambian de un país a otro, dependiendo de la ubicación geográfica.