Hace un año, el 11 de mayo de 2022, los disparos de un soldado israelí provocaron la muerte de la periodista palestina-estadounidense Shireen Abu Akleh cuando cubría una incursión militar israelí en las afueras del campamento de refugiados de Jenin, en el territorio ocupado de Cisjordania.

La periodista estaba usando un casco azul y un chaleco antibalas identificado claramente con la palabra “prensa” cuando recibió un disparo en la cabeza. Abu Akleh, una de las periodistas de televisión más destacadas del mundo árabe, había trabajado para el canal Al Jazeera durante un cuarto de siglo. Además, era ciudadana estadounidense. Sin embargo, un año después de su muerte y a pesar de las declaraciones detalladas de testigos presenciales del tiroteo, nadie ha sido responsabilizado por el hecho ante la justicia.

Emitimos fragmentos de un documental de Al Jazeera sobre el tema, titulado “The Killing of Shireen Abu Akleh” (El asesinato de Shireen Abu Akleh), que acaba de ganar un Premio George Polk. También hablamos del tema con el periodista Sharif Abdel Kouddous, uno de los realizadores del documental, quien señala: “Todavía no hay justicia en su caso, ni rendición de cuentas de ningún tipo”. Kouddous añade que, en contraposición con el alto perfil que ha mostrado la Casa Blanca frente al caso del reportero del periódico The Wall Street Journal Evan Gershkovich, que está preso en Rusia, la respuesta al asesinato de Abu Akleh apenas se ha oído.

“Shireen era ciudadana estadounidense y su familia merece de parte de la Casa Blanca los mismos pedidos de justicia y el mismo esfuerzo para que el hecho no quede impune”.

Fuente: Democracy Now