Con la aproximación de Eid Al-Adha, los gazatíes se preparan para recibir esta festividad religiosa. Las tiendas en la Franja de Gaza se llenan de personas con la intención de comprar los diversos productos tradicionales de estas fiestas, pero en el presente año hay poca demanda, debido al recrudecimiento del asedio y los altos precios de las mercancías, a la par con la falta de ingresos.
La reciente agresión israelí del pasado mes, ha sido uno de los factores que más ha perjudicado la compraventa en estas fechas. Las difíciles condiciones económicas y humanitarias son imposibles de ocultar a la vista de cualquiera. Por eso los comercios están repletos de mercancías, pero lamentablemente no hay compradores.
Aparte del asedio inhumano impuesto a esta población por parte del régimen israelí, el recorte de los salarios y el desempleo desenfrenado han perjudicado notablemente al mercado. Según los especialistas, este año el poder adquisitivo en Gaza es casi nulo.
A la población gazatí le gusta vivir y disfrutar de la vida a pesar de los obstáculos que llevan enfrentando desde varios años atrás. Por eso tienen la fe y la esperanza de que en los años por venir disfrutaran de estas fiestas en mejores condiciones.
Pese a los efectos fatales que causó la reciente agresión israelí a la Franja de Gaza, la población insiste en crear un ambiente festivo para esta celebración y dibujar sonrisas en los rostros de los niños y familias, como un intento de aliviar el sufrimiento causado por el ocupante sionista.
Huda Hegazi, Gaza