El Euro-Med Human Rights Monitor, tras llevar a cabo un estudio analítico con una muestra de 1200 personas en Gaza, publicó el martes un comunicado con la cifra correspondiente.
“Aproximadamente el 98 % de los participantes en el estudio afirmaron que consumían cantidades insuficientes de alimentos, mientras que el 64% admitió haber recurrido a comer pasto, frutas no maduras y alimentos caducados para saciar su hambre”, según el estudio, que se publicó justo en un momento en el que Israel ha enfrentado duras críticas por emplear el hambre de civiles como método de guerra, en violación del derecho internacional.
Los informes indican que el régimen israelí está bloqueando de manera intencionada el suministro de agua, alimentos y combustible a Gaza, al mismo tiempo que impide la asistencia humanitaria y destruye áreas agrícolas en el territorio palestino, todo ello en adición a los continuos bombardeos.
El bloqueo mencionado ha generado una catástrofe humanitaria en Gaza, donde la falta de acceso a servicios sanitarios y agua potable ha aumentado la prevalencia de enfermedades transmitidas por el agua.
El estudio de Euro-Med también revela que la tasa de acceso al agua en la Franja de Gaza, incluyendo agua para beber, bañarse y limpiar, es de 1,5 litros por persona al día. Esta cantidad es 15 litros menos que la cantidad mínima de agua necesaria para sobrevivir. A pesar de ello, el estudio encontró que el 66 % de los residentes de Gaza han experimentado diarrea, erupciones cutáneas o enfermedades intestinales en el último mes.
Israel lanzó la brutal guerra en Gaza el 7 de octubre después de que el Movimiento de la Resistent Islámica Palestina (HAMAS) llevó a cabo la Operación de Tormenta de Al-Aqsa contra el regimén sionista.
La brutal campaña de agresiones israelíes en Gaza ha causado al menos 19 667 muertos, incluyendo 6200 mujeres y más de 8000 niños. Las cifras oficiales indican además que al menos 7000 personas se encuentran desaparecidas, probablemente atrapadas bajo los escombros, de las cuales el 70 por ciento son mujeres y niños.
Los ataques también han provocado más de 1,8 millones de desplazados, lo que equivale a alrededor del 85% de la población de la Franja que ha tenido que abandonar sus hogares para preservar sus vidas.
En cuanto a los daños materiales, los informes indican que al menos 52 600 viviendas han sido destruidas por completo, mientras que otras 254 000 unidades han sufrido daños parciales. Además, al menos 282 escuelas, 112 mezquitas y tres iglesias han sido destruidas.
Al menos 53 centros de salud y otros 23 hospitales han quedado fuera de servicio debido a la falta de combustible, electricidad, equipos o ataques israelíes. Además, se suma el hecho de que 102 ambulancias han sido totalmente destruidas por los bombardeos.
La brutal campaña de agresiones israelíes en Gaza ha dejado al menos 53 centros de salud y otros 23 hospitales fuera de servicio debido a la falta de combustible, electricidad, equipos o ataques directos. Además, 102 ambulancias han sido completamente destruidas por los bombardeos.
La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) ha descrito a Gaza como un “infierno en la Tierra”, mientras que la Organización Mundial de la Salud (OMS) compara los complejos médicos del enclave con un “baño de sangre”.
Fuente: Hispantv