Los jefes del Comité Permanente Interinstitucional de la ONU confirmaron este miércoles que los horribles acontecimientos en la Franja de Gaza provocaron el desplazamiento de cientos de miles de personas y hoy están al borde de la hambruna.
En su comunicado, llamaron a los países que suspendieron la financiación de la Agencia de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (Unrwa) a reconsiderar rápidamente su decisión.
La Unrwa es la organización humanitaria más grande de la Franja de Gaza y proporciona alimentos, refugio y protección, incluso cuando sus empleados son también desplazados y hasta asesinados.
De acuerdo con el Comité, suspender las labores de esa Agencia tendrá consecuencias catastróficas para los residentes de la Franja de Gaza.
Ninguna otra entidad tiene la capacidad de brindar una asistencia que llegue a los 2,2 millones de personas necesitadas de ayuda urgente, afirmó.
Asimismo, enfatizó que detener las labores de Unrwa es arriesgado, conducirá al colapso del sistema humanitario en la Franja de Gaza y tendrá consecuencias de gran alcance para los derechos humanos en los territorios palestinos ocupados y en toda la región.
El martes, el Relator Especial de las Naciones Unidas sobre el derecho a la alimentación, Michael Fakhri, dijo que la hambruna será inevitables en esa zona palestina después de que algunos países dejaron de financiar a la Agencia.
Hasta el momento, Estados Unidos, Canadá, Australia, Italia, Reino Unido, Finlandia, Alemania, Países Bajos, Francia, Suiza, Japón, Austria y Nueva Zelanda frenaron la entrega de ayuda económica tras acusaciones de “Israel” que involucraron a empleados de la Unrwa en la operación Diluvio del Al-Aqsa.
Ante la denuncia sionista, la institución de la ONU decidió rescindir los contratos de 12 de sus trabajadores y abrir una investigación para establecer la verdad sin demora con el propósito de proteger la capacidad del organismo y brindar asistencia humanitaria.
Tras esta acción, la relatora especial de las Naciones Unidas sobre Palestina, Francesca Albanese, confirmó que la medida constituye un castigo a millones de palestinos en un momento delicado y viola sus obligaciones relacionadas con la Convención sobre el Genocidio.
Anteriormente, el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, reconoció que más de dos millones de personas en la Franja de Gaza dependen de la organización para sobrevivir.
Por su parte, el comisionado general de la Unrwa, Philippe Lazzarini, instó a los gobiernos a reconsiderar su postura.
Además de la cancelación por parte de “Tel Aviv” de las reuniones programadas para el miércoles entre Lazzarini y funcionarios de la entidad, las fuerzas de ocupación ingresaron a los centros de acogida de las Naciones Unidas en el barrio de Al-Rimal, en el centro de Gaza, y arrestaron a decenas de desplazados.