Docenas de versos coránicos tratan sobre la buena noticia de que se establecerá en la Tierra un gobierno global unificado.
Según el versículo 105 de la Sura Al-Anbiya:
El tema que Dios ha enfatizado tanto en este versículo debe ser uno con suma importancia y sensibilidad. Herencia significa transferencia de una propiedad o riqueza sin una transacción. Que los justos hereden la tierra significa que el gobierno y el dominio sobre la tierra les serán transferidos y las bendiciones de la tierra serán suyas. Si bien las bendiciones en el más allá también serán de ellos, lo que este versículo subraya es que tendrán todas las bendiciones de la tierra en este mundo.
El hecho de que entre todos los libros divinos, sólo estos dos (Salmos de David y la Torá) hayan sido mencionados en este versículo puede deberse a que el Profeta David fue uno de los principales mensajeros divinos que estableció un gobierno basado en la justicia y también los Bani Israil (pueblo de Moisés) era un pueblo oprimido que se levantó contra los opresores y heredó su tierra.
Otro punto aquí son los justos adoradores de Dios. ¿Quiénes son? Dado el amplio significado de la palabra Salihoon (los justos), parece que son meritorios en todos los aspectos, incluyendo el conocimiento y la sabiduría, el poder, la Taqwa (temeroso de Dios) y la fe, la sensatez y la prudencia, etc. Así que estar oprimido no es la única característica que lleva a la victoria sobre los enemigos y a gobernar la tierra. Los oprimidos no podrán gobernar la tierra mientras no logren revivir los dos principios de la fe y el mérito (competencia).
Cuando los justos adoradores de Dios adquieran los méritos necesarios, Dios les ayudará a cortar las manos de los opresores para que no gobiernen la tierra y se conviertan en herederos de la tierra. Por lo tanto, para que los creyentes adquieran diversos tipos de méritos necesarios, derroquen el gobierno de los opresores y hereden su gobierno, son necesarias la ayuda divina y la venida del Salvador, que es de la familia del Santo Profeta.