En respuesta a los informes que afirmaban que Ben-Gvir filtró información gubernamental sensible, Lapid enfatizó: "No se puede confiar a Ben-Gvir información clasificada, sobre la inteligencia 'israelí' o en el gabinete de guerra".

Criticando duramente a Benjamín Netanyahu, Lapid dijo: “Cualquier Primer Ministro en su sano juicio lo habría despedido”.

A Ben-Gvir se le había prohibido asistir a reuniones informativas de seguridad después de una serie de filtraciones de documentos confidenciales. Según The Telegraph, Ben-Gvir ha sido acusado de filtrar información y de violar los mismos principios de seguridad para los que fue designado y está siendo cada vez más marginado por el Gabinete de Guerra.

El Telegraph citó a una importante fuente de inteligencia “israelí” diciendo: “La mayor amenaza interna para 'Israel' es Ben Gvir. Actúa dentro de sus propias reglas y trata de ignorar a todos los que lo rodean, a pesar de su falta de experiencia en cuestiones de 'seguridad nacional' y 'defensa'”.

El mes pasado, los líderes del Shin Bet se negaron a reunirse con Ben-Gvir luego de repetidos enfrentamientos en reuniones semanales de seguridad que finalmente obstruyeron sus relaciones.

El Shin Bet acusó al ministro de filtrar información y violar el protocolo al llevar teléfonos móviles a las reuniones.

Ben-Gvir se enfrenta actualmente a cargos de fotografiar ilegalmente a asistentes secretos a reuniones de inteligencia de alto nivel, según el periódico "israelí" Haaretz.

Fuente: Al Ahed