En una conferencia ofrecida desde la Casa Blanca, el mandatario aseguró que la libre expresión está garantizada en el país, sin embargo, dijo que solo las "manifestaciones pacíficas" estaban protegidas.
"Es contra la ley cuando ocurre la violencia. La destrucción de propiedad no es una protesta pacífica. Va contra la ley. Vandalismo, allanamiento de morada, rotura de ventanas, cierre de campus, forzar la cancelación de clases y graduaciones: nada de esto es una protesta pacífica", dijo el mandatario.
El 30 de abril, agentes del Departamento de Policía de Nueva York entraron en la Universidad de Columbia con material antidisturbios y vehículos militares, y detuvieron a unas 300 personas, según el alcalde de Nueva York, Eric Adams.
Escenas similares se han visto en distintos estados del país, en los que elementos policiacos han dispersado a estudiantes que buscan presionar al Gobierno de EEUU para que exija un cese al fuego a Israel.
"Existe el derecho a protestar, pero no el derecho a provocar el caos. Las personas tienen derecho a recibir una educación, el derecho a obtener un título, el derecho a cruzar el campus de forma segura sin temor a ser atacados", dijo Biden en su conferencia de prensa.
Las manifestaciones estudiantiles en el país arreciaron luego de que, a finales de abril, el Gobierno de Estados Unidos aprobó un nuevo paquete de ayuda para Israel de aproximadamente 26.000 millones de dólares. De acuerdo con el mandatario de EEUU, la ayuda sería destinada para “reponer la defensa aérea” del país.
Sobre las manifestaciones, el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, quien ha hecho caso omiso a la presión internacional que exige un cese al fuego en Gaza, criticó las protestas estudiantiles en EEUU, asegurando que eran una "turba antisemita" que se había "apoderado" de los campus universitarios y pidió a las autoridades del país a que hicieran más para detenerlas.
El presidente Biden descartó que se haga uso de la Guardia Nacional para la dispersión de las manifestaciones en el país.
Fuente: Sputnik