En un dramático acontecimiento diplomático, el presidente estadounidense Donald Trump mantuvo una reunión inesperada con el presidente sirio Ahmad al-Sharaa y el príncipe heredero saudí Mohammed bin Salman, en la que participó por teléfono el presidente turco Recep Tayyip Erdogan. Las conversaciones marcan un punto de inflexión diplomático en las relaciones entre Estados Unidos y Siria y una reestructuración más amplia de la dinámica geopolítica en Oriente Medio.
La Casa Blanca confirmó la reunión en una declaración de la secretaria de prensa Karoline Leavitt, publicada en X, en la que Trump elogió la reunión como una “oportunidad histórica” para la paz y la reconstrucción en Siria.
Erdogan, dirigiéndose a la reunión de forma remota, elogió la reciente decisión de Trump de levantar las sanciones estadounidenses a Siria , una medida sin precedentes que se aparta marcadamente de las políticas de administraciones estadounidenses anteriores. Erdogan prometió la cooperación turca con Arabia Saudita para promover la estabilidad y la reconstrucción en Siria.
Por su parte, el príncipe heredero Mohammed bin Salman se hizo eco del respaldo de Erdogan, describiendo la decisión de Trump de aliviar las sanciones como “valiente” y expresando optimismo sobre la reintegración de Siria al redil diplomático regional.
Según el comunicado de la Casa Blanca, Trump presentó una propuesta de cinco puntos al presidente de transición de Siria, describiendo las expectativas de Estados Unidos para la normalización :
En respuesta, al-Sharaa acogió con satisfacción la apertura diplomática y reconoció la importancia de la reunión. Destacó lo que describió como una "oportunidad significativa" derivada de lo que percibe como la "disminución de la influencia de Irán en Siria", lo que indica un posible cambio estratégico en las alianzas de Damasco.
Al-Sharaa reafirmó el compromiso de Siria con el acuerdo de retirada de 1974 con “Israel” y expresó su voluntad de cooperar con Estados Unidos en la lucha contra el terrorismo y el desmantelamiento de los arsenales restantes de armas químicas.
También invitó a empresas estadounidenses a invertir en los sectores de petróleo y gas de Siria, presentando a Siria como un potencial “vínculo crítico” en las rutas comerciales globales entre Oriente y Occidente.
Trump se encuentra actualmente en una gira de cuatro días por Medio Oriente destinada a conseguir billones de dólares en inversiones para Estados Unidos, que incluye paradas en Arabia Saudita, Qatar y los Emiratos Árabes Unidos.
Fuente: Al Mayadeen