La declaración, que fija las prioridades conjuntas para ambos países para el próximo quinquenio, representa un logro para las pretensiones británicas que se superponen con el Sector Antártico Argentino.Durante el kirchnerismo, Argentina y Chile llevaron adelante una agenda antártica común. La sesión conjunta de las comisiones de Relaciones Exteriores de los parlamentos de ambos países, que en 2008 ratificó el acuerdo de 1953 firmado entre Perón e Ibañez Del Campo fue un claro ejemplo de como la unión latinoamericana podía poner límites a las ambiciones geopolíticas de los ingleses. Con el advenimiento de Macri, la política argentina cambió respecto al viejo ?Territorio Nacional de La Antártida e Islas del Atlántico Sur?, la firma de una declaración conjunta con Reino Unido motivó fuertes críticas incluso desde las filas de Cambiemos. Dicha declaración estableció pautas de cooperación ?UK-friendly?, reconociendo a los británicos privilegios de pesca en las zonas del Mar Argentino adyacentes a las islas, que podría extenderse a la explotación petrolera.