"Hay una generación de más de 100 millones de niños que tendrá que luchar durante toda su vida con enfermedades vinculadas con el sobrepeso, como la diabetes y las enfermedades cardíacas", se lamentó Andrew Stokes, de la Universidad de Boston, en una entrevista con el portal Vox.Al mismo tiempo, durante los últimos años, los países más ricos, como EEUU, lograron romper el vínculo entre la obesidad y las enfermedades, gracias a los avances médicos. Así, ahora es posible controlar la presión sanguínea con medicinas. Sin embargo, los medicamentos de este tipo no están ampliamente disponibles en los países en desarrollo. Por ejemplo, los sistemas de asistencia sanitaria de los países donde aumenta el sobrepeso, como Mali, Burkina Faso o Guinea Bissau, todavía no son capaces de "lidiar con este tsunami de enfermedades crónicas vinculadas con la obesidad", agregó Stokes.
No obstante, hay países donde el índice de obesidad sigue siendo bastante bajo, como Vietnam y Bangladés. Según indicó Stokes, este hecho constituye un motivo para ser optimistas, puesto que podría ayudar a los científicos a encontrar una solución para combatir la epidemia de obesidad a nivel mundial. El embajador mundial para las enfermedades no transmisibles de la OMS, Mike Bloomberg, declaró en un informe oficial que "esta es una epidemia global que no puede ser ignorada por los gobiernos, ya que hay muchos pasos que podemos dar para combatir la obesidad y salvar vidas". Fuente: Sputnik