En un país donde la islamofobia y la latinofobia es un factor constante en la vida cotidiana, los vecinos de la ciudad de Sacramento en California, Estados Unidos, muestran que la convivencia es posible.
Musulmanes y latinos conviven fraternalmente en Sacramento, promoviendo el amor y la unidad en una época en que desafortunadamente en muchos lugares parece reinar la hostilidad y el racismo.
Este movimiento comenzó hace tres años para contrarrestar la campaña retórica contra los musulmanes y latinos, la cual se intensificó durante la campaña electoral, y ha llegado a su máxima expresión después de que Donald Trump fuese elegido presidente.
Los musulmanes de Sacramento esperan que otros grupos étnicos y religiosos se unan a ellos, para la consecución de una sociedad justa donde no haya menosprecio para nadie.