Una mujer es agredida brutalmente en un hospital de Detroit (EEUU). La agresión ocurre cuando una señora con hijab espera a ser atendida en la recepción del hospital.
Un hombre se acerca por la espalda y le da varios puñetazos, hasta que le reducen. La mujer dice que ha sido un ataque por motivos religiosos y el agresor, con problemas mentales, dice que en el hospital le habían dejado sin su medicación.