El profesor de la Escuela Médica de Harvard (Estados Unidos) Walter Willett enfatiza que si las personas prescinden de la carne, se podrá evitar al menos una tercera parte de las muertes prematuras, y dice que los beneficios de una dieta basada en plantas han sido subestimados.
La comida salubre, o sea “una dieta basada más en plantas, no necesariamente vegana”, reduce los riesgos “de casi todo a lo que miremos”, sostuvo el jueves Willett en una conferencia celebrada en el Vaticano, según informa el portal Science Alert.
Durante los estudios, el equipo del científico dejó aparte factores como la actividad física y el tabaquismo y en estas condiciones, no comer carne implicaba una reducción sustantiva de “todas las muertes, no solo las muertes por cáncer”. De hecho, la razón de esta ventaja es que “todo en el cuerpo está conectado por los mismos procesos subyacentes”.
Según la investigación, al tomar en cuenta otros elementos y otros procesos en el cuerpo humano, se podrá lograr una cifra aún mayor en la reducción de muertes prematuras.
La idea fue apoyada en el Vaticano por el profesor de la Universidad de Toronto (Canadá) David Jenkins, quien recomendó “dieta de los simios”, ante todo la de los gorilas de planicie, que observó durante una expedición a África. Estos animales comen tallos, hojas, vides y frutas en lugar del alimento “paleolítico del hombre de las cavernas”, pobre en carbohidratos y con un énfasis en la carne.
Conforme a Jenkins, las personas que siguen su ejemplo presentan una reducción del 35 por ciento en el colesterol en dos semanas, lo que significa un efecto comparable con la toma regular de estatinas.