Las autoridades chinas han comenzado a controlar con tarjetas provistas de posicionamiento GPS a miles de musulmanes del país que viajan a La Meca en las proximidades del preceptivo periodo de peregrinación o Hayy.
El objetivo de este programa piloto, que proveerá de estas tarjetas a 3.300 peregrinos, es "hacer que el viaje sea mejor y más seguro", aunque también podría ayudar a que las autoridades chinas controlen los movimientos de esos viajeros, según el periódico Global Times, citado por Infobae.
La tarjeta dispone de un botón de emergencia por el que puede avisarse a responsables de la Asociación Islámica de China, dependiente del Partido Comunista y organizadora de estos viajes de peregrinación anuales.
Organizaciones de la minoría étnica uigur en el exilio acusan al régimen comunista de continuas represiones a su cultura y su religión, bajo la excusa de luchar contra el independentismo, el separatismo y el extremismo.