Las organizaciones musulmanas británicas pidieron el 2 de diciembre a la primera ministra Theresa May y a los líderes de los partidos que adopten una nueva definición de islamofobia respaldada por el grupo parlamentario multipartidista (APPG), que publicó su informe a fines de noviembre.

Unas 60 organizaciones en todo el país, incluido el Consejo de Musulmanes en Gran Bretaña (MCB), han declarado en una carta abierta que se ha vuelto “vital” que el gobierno adopte una definición que “abarque la realidad racista de la islamofobia y sus múltiples manifestaciones, que van más allá del mero odio anti-musulmán”.

“La islamofobia está arraigada en el racismo y es una forma que ataca las expresiones de lo que es musulmán o lo que se percibe como musulmán”, argumenta la APPG en su informe, que afirma que “el paso detectable de las manifestaciones visibles de la islamofobia a manifestaciones más sutiles o respetables -que lleva a la normalización del prejuicio en la medida en que se hace casi invisible para muchos- justifica una definición que puede detener y revertir esta trayectoria”.

Para los diputados, el desarrollo de una “definición funcional de islamofobia”, “de manera precisa y completa”, ayudará a combatir esta forma de racismo contra la comunidad musulmana para establecer “una sociedad más justa”.

mundoislam