Un cazador furtivo fue aplastado por un elefante y devorado por una manada de leones en Sudáfrica, y lo único que se recuperó de él fueron su cráneo y sus pantalones.
Los compañeros del cazador, que intentaba cazar de manera ilegal a rinocerontes, notificaron a sus familiares del suceso y ellos, a su vez, procedieron a solicitaron ayuda a las autoridades del Parque Nacional Kruger, Sudáfrica, donde acaecieron los hechos, para dar con el paradero de la víctima.
Sin embargo, solo lograron dar con un cráneo y un par de vaqueros, de acuerdo a un comunicado publicado recientemente por la organización Parques Nacionales de Sudáfrica.
Asimismo, informaron de que los acompañantes del cazador están bajo arresto. Tres hombres de entre 26 y 35 años se encuentran detenidos desde el pasado 3 de abril y les decomisaron dos rifles y munición, según un tuit de la Policía sudafricana.