Nigeria decidió dar una atención médica al Sheij Al-Zakzaky por el temor a que su posible muerte en prisión causara una gran inestabilidad en el país, afirma un experto.
El líder del Movimiento Islámico de Nigeria (IMN, por sus siglas en inglés), el Sheij Ibrahim Al-Zakzaky, que junto a su esposa fue detenido desde el diciembre de 2015 por el gobierno de Nigeria, ha llegado este martes a Nueva Delhi, la capital india, para recibir atención médica por su crítico estado de salud.
En una entrevista concedida este mismo martes a la cadena HispanTV, el analista internacional Luis José Fernández ha atribuido la medida al amplio número de la población musulmana que reside en Nigeria, pues, esta cifra ronda casi 20 millones de personas y en su mayoría son seguidores del clérigo.
“Por lo tanto, el régimen de Nigeria no se atrevió afrontar la posibilidad de que este líder religioso pudiera fallecer y entonces, le han permitido salir a La India para recibir allí el tratamiento médico”, ha argumentado.
Por lo tanto, el régimen de Nigeria no se atrevió afrontar la posibilidad de que este líder religioso pudiera fallecer y entonces, le han permitido salir a La India para recibir allí el tratamiento médico”, dice el analista internacional Luis José Fernández en alusión al permiso dado al líder del Movimiento Islámico de Nigeria (IMN, por sus siglas en inglés), el Sheij Ibrahim al-Zakzaky para viajar a La India para recibir atención médica.
Fernández ha comentado que, pese a esto, el Movimiento Islámico de Nigeria ha sido prohibido por las autoridades de Nigeria debido a la presión de Arabia Saudí y de otros países que temen la existencia de un movimiento islámico, concretamente shiíta, en este país africano, ya que esto pude debilitar la corriente wahabí en el oeste de África, siendo responsable de actos brutales como el surgimiento de Boko Haram y toda una serie de crímenes que este grupo terrorista ha cometido.
En cuanto al silencio que guardan la comunidad internacional y los grandes medios de comunicación sobre la situación en Nigeria, el comentarista ha sostenido que el IMN es una fuerza autónoma que busca representar a un grupo de musulmanes que no siguen los dictados de Arabia Saudí, ni de los Emiratos Árabes Unidos (EAU), ni de ningunos de los secuaces de EE.UU. en esta región.
“Este movimiento da una imagen positiva del Islam y además, apoya la independencia de Nigeria frentes a los dictados de las grandes potencias”, ha precisado.
Los occidentales y sus medios ignoran a estos musulmanes, tal y como sucede en el caso de Bahréin donde se haya una gran masa de población de mayoría shiíta, reprimida por el régimen de los Al Jalifa, porque desean un Islam radical que ocupe titulares terribles en los territorios occidentales, ha hecho hincapié Fernández.