Aunque el presidente Trump intente aludir el envío de crudo como gesto solidario, el propósito fundamental es controlar el valor de precio y evitar un aumento que afectaría su control en el mercado.
El presidente de los Estados Unidos (EE.UU.), Donald Trump, anunció este domingo la liberación de reservas petroleras del país tras el ataque a dos refinerías saudíes el pasado sábado con el propósito de garantizar el suministro mundial.
"Basado en el ataque a Arabia Saudita, que puede tener un impacto en los precios del petróleo, he autorizado la liberación de petróleo de la Reserva Estratégica de Petróleo, si es necesario, en una cantidad por determinar", indicó Trump en su cuenta de twitter.
Tras el ataque yemení, dos refinerías saudíes de la empresa Aramco, fueron perjudicadas generando una reducción de crudo del 50 por ciento, lo cual generó un incremento superior de casi una quinta parte durante las primeras transacciones del día.
"También he informado a todas las agencias apropiadas para acelerar las aprobaciones de los oleoductos que se encuentran actualmente en el proceso de permisos en Texas y otros estados", recalcó el presidente estadounidense.
El Departamento de Energía estadounidense había adelantado la noticia que "estaban preparando medidas", tienen como propósito controlar el control petrolero y no generar que los precios internacionales se disparen.
Las reservas que ofrece la Casa Blanca están situadas en enormes cavernas subterráneas en la costa del Golfo de México, puntualmente entre los estado Texas y Luisiana.
Tras el ataque, el Gobierno Trump ha lanzado acusaciones falsas contra Irán, acusándolo de financiar insurgentes hutíes de Yemen, como respuesta al ilegal bloqueo económico que padece el país persa por parte de EE.UU.