El Departamento de Defensa de Estados Unidos (el Pentágono) anuncia que enviará fuerzas adicionales al este de Siria para supuestamente proteger los campos de crudo del grupo terrorista ISIS. Y pretenden que el mundo se crea eso.
“Estados Unidos está decidido a fortalecer sus posiciones con activos militares adicionales para evitar que esos campos petroleros caigan en manos” del grupo terrorista ISIS (Daesh, en árabe) “u otros actores desestabilizadores”, ha informado este jueves un funcionario del Pentágono en un comunicado.
Ha alegado que EE.UU. adoptará todas las medidas a su alcance para negar a la agrupación terrorista de ISIS este flujo de ingresos, y así impedir su resurgimiento en la región. Recordemos que numerosos analistas internacionales le adjudican la creación de ISIS al propio EE.UU. y a sus socios regionales.
“Una de las ganancias más significativas de Estados Unidos y nuestros socios en la lucha contra Daesh fue conseguir el control de los campos petroleros en el este de Siria, una fuente crucial de ingresos para ISIS”, ha subrayado el Pentágono.
Desde hace décadas, EE.UU. ha puesto su mirada en los ricos yacimientos de petróleo de Oriente Medio, y para conseguir su objetivo ha lanzado guerras utilizando varios alegatos. Los analistas, a su vez, cuestionaron el verdadero control de EE.UU. sobre las reservas petrolíferas en la región del oeste de Asia, tal y como alegaba Washington.
Ante tal coyuntura, el Gobierno del presidente sirio, Bashar al-Asad, insiste en que los recursos naturales del país pertenecen únicamente a los sirios, por lo que el control debe estar en manos de Damasco.
El anuncio del Pentágono surge después de que el presidente Donald Trump ordenara la semana pasada la evacuación de prácticamente todas las tropas destacadas en la zona, mientras el conflicto entre el Ejército turco y las milicias kurdas se recrudecía.
Pero el miércoles Trump anunció que un “pequeño número” de tropas estadounidenses se quedarían para proteger los campos petroleros en el este de Siria.