El Gobierno iraní anunció el 14 de noviembre el aumento de los precios de la gasolina en el marco del racionamiento de la energía. La medida desató una serie de protestas en distintas ciudades de Irán. No obstante, grupos de alborotadores se infiltraron en las manifestaciones pacíficas y, aprovechando la coyuntura, atacaron infraestructuras y propiedades públicas y privadas con el objetivo de derrocar el Sistema de la República Islámica.

Los tribunales iraníes han recibido, hasta el momento, más de 360 denuncias por parte de personas naturales sobre los daños sufridos a raíz de “la implicación directa de Estados Unidos” en las recientes protestas.

Como consecuencia, la Justicia iraní ha sentenciado a EE.UU. a pagar en total 130 mil millones de dólares para indemnizar los damnificados, según ha informado el portavoz del Poder Judicial de Irán, Qolam Hosein Esmaili, en una rueda de prensa celebrada este martes en Teherán, capital persa.

“Los tribunales han atendido, hasta la fecha, más de 360 denuncias interpuestas por la gente corriente, no de nuestro Gobierno, y han dictado en total una multa de 130 mil millones de dólares contra el Gobierno estadounidense y a favor de los ciudadanos perjudicados”, ha afirmado Esmaili.

Asimismo, ha pedido a la Cancillería de Irán que haga el proceso pertinente para aplicar los veredictos y hacer que se cumpla con el pago por los daños y perjuicios.

Esmaili, en otro momento de sus declaraciones, ha denunciado que EE.UU. apoya, por un lado, los disturbios y las violaciones a los derechos humanos, y por el otro, da sermones horas enteras sobre la defensa que brinda a los derechos humanos.

“Hoy denunciamos a EE.UU. por haber usado sus capacidades en el mundo virtual y sus capacidades satelitales para incitar, desde una lejana zona a miles de kilómetros, a la violencia y la guerra para matar a los civiles inocentes en la región”, ha resumido el portavoz del Poder Judicial de Irán.

Tras unos días de protestas y actos violentos, decenas de miles de iraníes han salido en varias ocasiones a las calles para expresar su repudio a los actos vandálicos y manifestar su apoyo al poderío y la seguridad del país. Distintos analistas coinciden en que el apoyo de la nación a Teherán tiene sus raíces en que los iraníes tienen una buena memoria histórica y no olvidan el comportamiento criminal de EE.UU. en su contra.

Hay otros que también han detectado las huellas de revoluciones de colores de la Agencia Central de Inteligencia estadounidense (CIA, por sus siglas en inglés) en los acontecimientos suscitados en el país persa.

Fuente: Hispantv