El arzobispo palestino de la Iglesia Ortodoxa Griega de Jerusalén Al-Quds, Atallah Hanna, sin duda denunció la ocupación israelí y destacó su apoyo a la causa y al pueblo palestino, instando a los cristianos de todo el mundo a hacer lo mismo.
"Nos quedaremos en Jerusalén Al-Quds para defender nuestros sitios y nuestros recursos religiosos. Rechazamos las políticas sobre el asunto. No nos rendiremos".
En una entrevista exclusiva con MEMO durante la "Conferencia mundial sobre el apartheid israelí" celebrada en Estambul la semana pasada, Hanna dijo:
"Jerusalén (Al-Quds) es la ciudad de las tres religiones abrahámicas, pero los cristianos y musulmanes palestinos que viven en Jerusalén sufren de ocupación, represión, tiranía y opresión".
Hizo hincapié en el aumento de las políticas impuestas por el apartheid en la Ciudad Santa y en el resto de Palestina:
"La ocupación en Jerusalén nos trata como si fuéramos invitados y extranjeros en nuestra ciudad. Esta es la concreción de las políticas y prácticas del apartheid contra nuestro pueblo en Jerusalén, en particular y en general en Palestina".
Hanna afirmó firmemente que el sistema de apartheid impuesto por el régimen israelí, que separa a los palestinos de los judíos israelíes y los trata como ciudadanos de segunda clase que no disfrutan de derechos justos, como el acceso a ciertas áreas de la ciudad, empleos etc.
"No será suficiente sacar a los cristianos de la ciudad y detenerlos en defensa de la causa y la justicia palestinas".
Él agregó:
"Permaneceremos en Jerusalén para defender nuestros sitios y nuestros recursos religiosos. Rechazamos las políticas de empleo. No nos rendiremos. Nuestro lema siempre será: dignidad y libertad para el pueblo palestino. Nuestros sitios religiosos seguirán siendo nuestros. Jerusalén seguirá siendo nuestra. nuestro ".
Finalmente agregó:
"Rechazamos la decisión injusta de Estados Unidos de apoyar las políticas israelíes y la ocupación de Jerusalén".