Tres integrantes del grupo terrorista Yeish Mahavir As-Saura fueron arrestados la semana pasada por las Fuerzas Armadas de Siria después de que fueran cercados en un campo de minas cerca de la ciudad de Palmira.
Uno de los terroristas, identificado como Abdulá al-Mishuat, dijo a los periodistas que tanto él como sus compañeros fueron entrenados en un campo militar bajo supervisión de instructores estadounidenses, según un informe publicado este martes.
“Los instructores estadounidenses nos enseñaron a manejar todo tipo de armas. Todas las armas eran de fabricación estadounidense. Vi a los instructores estadounidenses que venían para entrenarnos, no obstante, los conductores eran sirios”, precisó.
Los entrenamientos eran difíciles y duraban dos o tres horas de manera consecutiva. Los instructores estadounidenses monitoreaban y evaluaban el proceso de entrenamiento desde lejos, explicó.
Otro terrorista, identificado como Yasem al-Ali, dijo a su vez que en el campo de entrenamiento, también les dieron instrucciones de cómo recopilar información sobre las posiciones del Ejército sirio y sus aliados.
“Nuestro equipo consistía en ocho miembros: siete combatientes y un cabecilla, que estaba encargado del contrabando y el transporte del personal y drogas”, agregó.
Diferentes informes han mostrado cómo Washington usa las bases militares que ha construido de manera ilegal en el norte y este de Siria para entrenar y apoyar a los terroristas takfiríes, especialmente en momentos en los que el Ejército sirio y sus aliados han asestado duros golpes a los extremistas, liberando la mayor parte del país.
Fuente: Al Ahed